Los refractómetros manuales analógicos permiten medir de forma rápida, segura y económica el contenido de azúcar en...
¿Qué es un refractómetro?
Gracias a los refractómetros, es posible medir el índice de refracción: cuanto mayor sea la concentración de la muestra, mayor refracción de luz se produce. El principal objetivo del refractómetro es analizar las diferentes sustancias que hay presentes en una materia e identificar sus componentes para así evaluar su estado de pureza.
¿Qué tipos de refractómetros hay?
Actualmente, podemos distinguir entre dos tipos de refractómetros: manuales y digitales. Cada uno tiene un sistema diferente a la hora de detectar el índice de refracción de la luz para analizar sustancias. Los métodos manuales incluyen refractómetros ópticos portátiles y tipo Abbe, que requieren de una mano experta para su uso, ya que afecta a la exactitud de los resultados. Por otro lado, encontramos refractómetros digitales como instrumentos de sobremesa y portátiles.
El refractómetro de Abbe
Nombre dado por Ernst Abbe, el inventor del primer refractómetro. El funcionamiento de este instrumento se basa en la reflexión total de la luz. Es capaz de detectar la concentración de diferentes sólidos como las sales, proteínas, ácidos o azúcares. Los refractómetros de Abbe sólo son capaces de medir soluciones con un índice de refracción inferior al del vidrio Flint. Al tener esta limitación, el refractómetro incorpora un termostato ubicado en el sistema óptico para corregir la temperatura.
El refractómetro digital
Gracias a los avances tecnológicos aparecieron los refractómetros digitales. Estos ayudan a analizar el contenido de glucosa, maltosa y lactosa presentes de forma más rápida y precisa. Este tipo de refractómetro elimina la necesidad de registrar datos manualmente. De hecho, contiene una pantalla que muestra la temperatura de las diferentes tomas y, además, las almacena inmediatamente en la memoria externa.
Los refractómetros digitales funcionan de la misma manera que los refractómetros de mano y ofrecen una menor variabilidad entre operadores y una mayor precisión en comparación a los refractómetros manuales.
Refractómetro de mano
Los versátiles refractómetros de mano son muy fáciles de utilizar. Puede tener muchas aplicaciones debido a la disponibilidad de varias escalas de medición. Una pequeña gota de líquido en el prisma de medición es suficiente para determinar el índice de refracción.
El valor medido puede leerse en la escala a través del ocular al mantenerse contra una fuente de luz. Para la compensación de la temperatura de los líquidos, existen refractómetros de mano con corrección automática de la temperatura (ATC) integrada.
¿Qué uso tiene el refractómetro?
Los refractómetros son muy versátiles. Pueden emplearse para analizar la calidad de detergentes, ambientadores, lociones y otros productos químicos. En el sector de la alimentación, analizan zumos, lácteos, salsas y azúcares refinados.
El refractómetro: la clave para determinar la pureza
En definitiva, el refractómetro es un instrumento adaptado para ayudar en la identificación de sustancias y definir el grado de pureza de cada una de ellas. La producción de alimentos, alcohol, aceite, etc…El dispositivo nos permite conocer las características de cada elemento y/o sustancia. En esta línea, es capaz de:
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Establecer la madurez de la fruta por la concentración de azúcar.
- Mostrar y confirmar si las sustancias son puras.
- Precisar en qué proceso de producción nos encontramos respecto al punto final.
¿Qué mantenimiento necesita un refractómetro?
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Es importante mantener limpios tanto el prisma como el aparato, ya que la suciedad puede influir negativamente sobre su precisión en la medición de cualquier sustancia.
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En la fase de limpieza, es necesario emplear un paño húmedo y evitar limpiadores agresivos y no aptos para este instrumento. Además, hay que ser cuidadosos para no causar ninguna ralladura.
- Evitar caídas y/o golpes que puedan dañarlo.
- Mantener el refractómetro en un lugar seco.