El monitoreo del agua potable, ya sea en el agua cruda, en la clarificación o el agua final, es el uso más común de la medida de la turbidez ya que es el parámetro clave indicador de la calidad del agua.
Hoy en día, la producción de agua potable municipal obtiene un agua de muy baja turbidez (> 0.1 NTU), por lo que la medición se vuelve cada vez más dependiente de la técnica del operador y las especificaciones del turbidímetro. Los niveles pueden variar significativamente, por ejemplo:
- 5 NTU: Límite máximo recomendado por la OMS para el agua potable, aunque recomienda por debajo de 1 NTU (0.5 NTU para filtración directa o convencional)
- 4 NTU: Nivel mínimo capaz de percepción visual, aceptable para el agua del grifo
- 3 NTU: Estándar chino para determinadas aplicaciones
- 1 NTU: El nivel máximo obtenido mediante un tratamiento moderno
- 0.1…0.2 NTU: Por debajo de estos niveles para la industria farmacéutica